Por Enrique Guerrero Rivera “Aspirante Eterno”
Extracto del Boletín Danzón Club No. 79 (Septiembre, 2016)
Un cordial abrazo a todos los que aman el ritmo antillano
Dentro del marco de los festejos del 485 Aniversario de la Fundación de la muy Noble y Leal ciudad de Santiago de Querétaro, en donde hubo la presencia de una pléyade de grupos y artistas para el variado gusto de la cosmopolita población de la ciudad, en que nos ha convertido la evolución que discurre en todas las ciudades del mundo por la facilidad de emigración existente. A los Danzoneros de la ciudad nos toco el platillo fuerte con la presencia de “La Primera Danzonera de América de Diego Pérez” como se ha dado en llamar en la actualidad, a partir de la ausencia física del maestro Diego Pérez y Reyes. Su actuación se dio en la Plaza de los Fundadores el día lunes 25 de Julio que es precisamente la fecha histórica de la Fundación y esta plaza se encuentra frente al Templo de la Santa Cruz, antes llamada Cerro de San Gremal.
En éste sitio nos dimos cita casi la totalidad de bailadores de Danzón de la ciudad y además bailadores de ciudades circunvecinas, como Celaya, San Juan del Rio, San Miguel de Allende, Irapuato, León, por lo que se convirtió en una fiesta en donde el Danzón fue el protagonista. Hubo varias intervenciones ante el micrófono de parte del conocido timbalista de la danzonera, el Gran Polo, quien es amigo de muchos de los bailadores presentes, dando saludos a sus conocidos, así mismo lo que más destacó de sus participaciones discursivas fue la aclaración, me parece en tono de broma, la que describo con sus propias palabras;”Dicen que yo les pongo trampas a los bailadores para dejarlos con los pies abiertos en los remates, y eso No es cierto, pues si yo cambiara el compás, a quienes volvería locos sería a los músicos y no a Ustedes” y en seguida interpretaron un arreglo a Danzón de una de las muchas canciones del tapatío Gonzalo Curiel llamado “Caminos de ayer” el cual presenta una irregularidad al final de la línea melódica en el montuno ya que son nueve compases binarios y no siete más la síncopa o como coloquialmente le llaman “remate”, empero bajo la advertencia, la mayoría estuvimos alertas a terminar en tiempo musical, o sea con los pies cerrados.
Cabe destacar que en lo personal, ya presentía cuales danzones interpretaría la danzonera, pues al parecer la percepción de los músicos, es que en la provincia los bailadores son menos técnicos que los de la ciudad de México, por lo que se dedicaron a presentar en su gran mayoría danzones clásicos, tales como Rigoletito, El bombín de Barreto, Almendra, y por supuesto Nereidas, exceptuando el de Caminos de Ayer a pesar de las múltiples peticiones que se les presentaron.
Siento que el que se presentara la Primera Danzonera de América en nuestra ciudad, lo hago parecer como un verdadero suceso extraordinario, y para ser veraces, así lo fue, ya que no es muy frecuente que podamos bailar al compas de las notas en presente de una organización como ésta, pues como menciona el amigo Leonardo Rosen de San Miguel de Allende en uno de sus comentarios en el anterior Boletín Danzonero, EL DANZÓN ENFRENTA UNA TRADICIÓN RETRÓGRADA EN ALGUNAS CIUDADES PEQUEÑAS y sobre todo en tiempos pre electorales, ya que somos considerados botín político para los candidatos o como en éste mes en que se celebra el Día del Adulto Mayor y las autoridades se muestran generosas para con éste sector de la población. En nuestra ciudad tenemos oportunidad de bailar con ésta música en vivo solo ocasionalmente, como el caso de San Juan del Río y después en Querétaro, ocasionado por la necesidad de las autoridades de ofrecer en estos festejos el entretenimiento para cada sector de habitantes en las importantes fechas, mas después de ello ya no lo hay, solamente queda el tradicional evento de los Danzoneros del Jardín del Arte de Querétaro, en el matinée anual que es gratuito y en el baile de Gala el cual tiene un costo. Por supuesto que no es posible soslayar la actuación semanal de la Banda de Música del Gobierno del Estado de Querétaro que nos ofrece además de la música académica, como oberturas y sonatas, varios boleros o habaneras, así como piezas ligeras de baile como mambo y chachachá, incluye en su repertorio la tradicional tanda de cinco Danzones como colofón de la serenata dominical, los cuales en su repertorio no son más que cerca de 30 danzones por lo que tienen que hacer un rol para no repetirlos tan seguido. Claro que nunca se podrá disfrutar el danzón como cuando lo interpreta una danzonera, pues el sabor y la sabrosura del ritmo se aprecian muy similares, más no idénticos.
Quiero agradecer los comentarios y la corrección a algunos aspectos de mi anterior artículo, en donde le doy toda la razón, al Sr. Jorge Francisco Alegría Blas acerca de la circunstancia de los niños de Cortazar, Guanajuato, al bailar sin que exista música, para mí entender es como ser sordo, ya que el cerebro no capta el ritmo que es el que induce el movimiento, cosa que ocurre con varias parejas de bailadores cuando se interpreta el Danzón CIRCULANDO que contiene en el montuno un silencio de nota cuadrada, con duración de cuatro compases y que se continúan ejecutando una serie de figuras que no tiene sustento musical y como bien apunta Luis Pérez, esto de las rutinas es solo una mecanización de movimientos sin que se soporten en la música, además de que el Danzón es Baile de Salón y no de escenario o teatro. Por otra parte también le agradezco su corrección y le ofrezco mil disculpas al Sr. Ricardo Zamorano Escobar ya que confundí el nombre del grupo que se presentó en San Juan del Río portando vestimentas de pachucos los caballeros a quienes mencioné como ESCUELA NACIONAL DE DANZÓN ABEL AYALA, por haber sido uno de los dos grupos vestidos de esa manera durante el evento, y que el nombre correcto es “AMO EL BAILE FINO DE SALÓN”.
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