Por Luis Pérez “Simpson”
Extracto del Boletín Danzón Club No. 75 (Mayo, 2016)
Agradezco a mi amigo Alejandro Cornejo Mérida la invitación para asistir a esta presentación de su nuevo libro, deseándole mucho éxito es este sendero paradisiaco que es el danzón.
El día jueves 21 de abril de 2016 a las 18 hrs se llevó a cabo en el centro cultural, “La Nana, Fábrica de Creación e Innovación” (1), la presentación del libro “DANZÓN UNA SENDA AL PARAÍSO”, segundo libro que sobre el tema “danzón”, ha escrito nuestro amigo y colaborador, Alejandro Cornejo Mérida. Cabe apuntar, que dicho evento se dio dentro del marco de los festejos del décimo aniversario de este recinto cultural.
No es la primera vez que se hace la presentación de este libro, ya se tuvo la oportunidad de presentarlo en las ciudades de Coatzacoalcos, Minatitlán y Nanchital, dichas poblaciones pertenecientes al hermoso y danzonero Estado de Veracruz.
Dentro de la Cultura del Danzón, es muy importante dar a conocer este tipo de publicaciones, sobre todo a los amantes de este cadencioso ritmo, que para ser sinceros, lamentablemente son pocos los que realmente se interesan por leer la literatura danzonera que se ha escrito tanto en nuestro país, como allende nuestras fronteras
Para la presentación de este libro, el presídium estuvo conformado por Alejandro Cornejo, Macedonio Santiago Martínez y Miroslava Cruz Terán, también estuvo como conductora del evento, Grisell Aguirre.
El primero en tomar la palabra fue el Sr. Macedonio Santiago, quien nos habló sobre los conceptos que escribió en el prólogo de este libro, destacando el trabajo de Alejandro Cornejo, quien inspirado por su pasión y delirio por el danzón ha dado por resultado la edición de esta obra. Macedonio nos hace ver que el autor evidentemente no partió de cero, ya que cita en su libro a varios autores que le han precedido en este viaje por el sendero danzonero y que concuerdan con esa frase de algún desconocido, “El danzón es un viajero incansable” que se plasma en ese recorrido desde Matanzas, Cuba hasta la ciudad de México a finales del siglo XIX. También destacó la parte poética de este libro, misma que se compone de tres poemas con los que inicia el libro en cuestión.
Posteriormente tomó la palabra Alejandro Cornejo, quien nos deleitó con esa exquisita manera de relatar sus sentimientos, impresiones y experiencias que le ha brindado el andar por este sendero danzonero, de hecho nos comunicó que donde se plasma la idea del sendero que vincula el paraíso con el danzón y viene puntualmente relatado en capítulo titulado “Andanzas Danzoneras” en donde a través de viajar a los diferentes eventos danzoneros en nuestra republica mexicana, ha tenido la oportunidad de conocer a mucha gente ligada a este “boom danzonero”, refiriéndose a promotores de eventos, parejas famosas de baile, profesores, músicos, periodistas, orquestas danzoneras, claro, en estas andanzas también tuvo la dicha de conocer ciudades , paisajes paradisiacos, sitios históricos afirmando con esto que el danzón también es Historia, Cultura y Tadición; con todo este “cocktail” de vivencias y con la pluma de Alejandro nos ha legado un testimonio histórico, aunque él mismo puntualizó que “este libro no tiene características históricas sobre el danzón”, yo les aseguro que sus relatos forman ya parte de la nueva historia del danzón en México.
Estas Andanzas Danzoneras, como lo mencionó el autor, fueron la inspiración para el título del libro, titulo por cierto muy sugestivo, vamos, que nos sugiere algo, ese mágico sendero llamado danzón que nos conduce al paraíso y que con toda precisión Alejandro nos dijo en pocas palabras que el “mismo danzón es el paraíso”, cuando uno está bailando este cadencioso ritmo abrazando a la pareja, es estar en el paraíso, es tocar ese “pedacito de cielo”, como el título del danzón compuesto por el músico oaxaqueño Leopoldo E Olivares .
También recuerdo que hizo énfasis sobre el arte de la danza, el arte que impregna a este ritmo y la danza como primera expresión comunicativa del ser humano. Finalizó nuestro amigo Alejandro con la lectura de los dos últimos párrafos de su poema titulado “Dile al Danzón” que también forma parte de este libro.
Para finalizar con broche de oro esta presentación, la señorita Miroslava Cruz Terán, leyó el poema “Mi linda Danzonera” incluido también en este libro y, afirmo que fue un acierto comenzar el libro con una parte poética, es decir tener a la poesía como puerta mágica para recorrer este sendero al paraíso.
Finalizando estas tres exposiciones se procedió a la sección de preguntas y respuestas, desgraciadamente no hubo preguntas sustanciales, solo dos personas que preguntaron sobre donde se podía adquirir este libro, como ven, es lamentable que después de tres excelentes exposiciones sobre el contenido de esta obra no haya habido la debida atención por parte del público, esto viene a corroborar lo dicho al principio, a la mayoría de los danzoneros no les interesa la literatura sobre este ritmo, pareciera que solo les interesa la parte coreográfica del danzón, porque así los han formado y no podían faltar las coreografías, no sé el porqué los organizadores de estos eventos insisten en mezclar el agua con el aceite, ¿que no saben lo que representa la presentación de un libro donde se deben analizar los detalles del mismo con preguntas y diálogos interactivos?, pues bien tal parece que no, la gente ya le andaba por ver estos remedos del danzón llamados coreografías, mismas que estaban incluidas en el programa, para lo cual, se presentaron dos grupos, ambos dirigidos por el profesor, Fredy Salazar, ejecutando una coreografía por grupo y otra más de dos parejas.
Terminando estas presentaciones grupales, el público a voz en cuello pidió que Alejandro Cornejo bailara un danzón y sin más preámbulo se dirigió a la señorita América Gutiérrez Chavarría para solicitarle bailar el danzón Mata Majá y, a decir verdad tuvieron una muy aceptable ejecución dancística que el público aplaudió.
La culminación del evento estuvo a cargo de la directora de este Centro Cultural, Lucina Jiménez López, quién pronunció unas palabras de agradecimiento y comprometiéndose a seguir dando difusión al danzón.
(1).- El edificio llamado “La Nana” es una edificación tipo industrial de principios del siglo XX, la cual funcionó como una subestación de energía eléctrica para alimentar a la red de tranvías eléctricos de la ciudad de México de ahí viene su nombre, esto desde los años 20’s, hasta los 60’s, o mejor dicho hasta que desaparecieron los tranvías. Falsamente se dice que en ese lugar estuvo el legendario Salón México, infame y perversa mentira, porque la gente se lo llega a creer. En 1993 se adaptó este inmueble como salón de baile usurpando el nombre del legendario Salón México que solo resultó un remedo efímero. En 2009, el edificio retoma su nombre original y se convierte en La Nana, Fábrica de Creación e Innovación.
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