Por Luis Pérez “Simpson”
Extracto del Boletín Danzón Club No. 111 (Mayo, 2019)
En varias ocasiones que he tenido la oportunidad de asistir a los famosos “Bailes de Gala” que se efectúan dentro de las “Muestras Nacionales de Danzón” en la Republica Mexicana y, he podido percibir que no todos los asistentes portan la vestidura adecuada para un evento que se anuncia con la categoría “De Gala”.
Considero que es importante, salvo la mejor opinión de ustedes, entender que un evento de gala o de etiqueta, son de carácter formal y usualmente se realizan por la noche.
Un protocolo muy característico de los eventos de gala, es la invitación personalizada, donde se identifica el código de la vestimenta que, en la mayoría de las veces viene detallado y, en el supuesto de que no viniera, es necesario averiguarlo con los organizadores.
Hay que puntualizar que existe una diferencia entre un “Evento Formal” y uno De Gala, en los eventos formales, la vestimenta es elegante, pero en uno “De Gala”, este lleva un protocolo establecido.
Decir “De Gala”, tratándose de vestimenta, es la aplicación al traje elegante exigido rigurosamente para este tipo de eventos, por lo regular se anuncian como “Cena Baile de Gala”, recordar siempre que Gala es sinónimo de elegancia y distinción.
En un evento de gala y siguiendo su protocolo, las damas deben ir de vestido largo, nunca deben ir de pantalón ni de minifalda, mucho menos de microfalda, es más ni siquiera vestido a la rodilla (algunos le llaman vestido de “cocktail”, recordemos que en estos “Bailes” .los anuncian con la categoría de “Gala”.
En los caballeros, siguiendo los códigos de gala en cuanto a vestimenta, deben ir de “Smoking”, “Tuxedo”, “Frac” o el famoso “Dinner Jacket” traje de preferencia oscuro tratándose de un evento nocturno, nunca de saco sport, mocasines, botas vaqueras, etc.
Repito, hablar de un evento con categoría de gala es algo serio que implica la formalidad, elegancia y sobre todo apego a los protocolos.
Bien recuerdo que a los primeros de estos “Bailes de Gala” propios de las “Muestras Nacionales de Danzón” donde ingenuamente asistí, me fui con la “finta” y porté mi clásico “tacuche” negro, camisa blanca y corbata de moño, pero, oh sorpresa, muchos (as) de los asistentes no portaban la vestimenta propia para un Evento de Gala, tal y como venia anunciado en el programa publicitario. Me encontré con gente que infortunadamente confundió la gala con una fiesta de disfraces, otros, como si el evento se tratara de un rodeo texano, otros con chamarras de cuero, no faltaron los que portaban la falsa y distorsionada vestimenta de “pachucos” (aclaro, respeto mucho a los auténticos pachucos, más no a los que se disfrazan solamente para la ocasión), más parecidos a unos payasos de circo (por la vestimenta exagerada y colores que casi rompen las retinas) y, claro los que portaban las tradicionales y cómodas guayaberas.
En cuanto a las damas pude percibir que varias de ellas sobre todo jovencitas portando minifalda, claro, se ven muy bien, pero esto definitivamente no es gala y lo que es peor, algunas despistadas usando pantalones. No dejó de sorprender el grotesco espectáculo de ver una larga fila de personas haciendo fila y hasta con bolsas de plástico, antes de que los promotores se dignaran a pasarlos al salón, aun ya rebasando la hora programada para el inicio, y aun se atreven a anunciarlo con categoría de gala.
Algo que me llamó la atención en estos mal llamados “Bailes de Gala”, es el hecho de que los mismos organizadores no respetaban los protocolos, ellos, portaban guayabera o vestimenta informal, fue entonces que decidí asistir de guayabera a dichosos “Bailes de Gala” que realmente solo de “gala” tienen el nombre (quizá algunos a los que no he podido asistir, si respeten el protocolo requerido para un evento de esta categoría), claro que a muchos “promotores, los protocolos no les interesan en lo más mínimo, lo que realmente les interesa es ingresar al mayor número de gente a sus mal llamados “Bailes de Gala” y, en cierta forma es entendible para “recuperar” su inversión, más no justificable.
Les confieso, que para bailar danzón, la guayabera es una prenda bastante cómoda, permite el libre movimiento de brazos además de ser fresca por lo que me encanta usarla para los bailes tanto en espacios abiertos como cerrados, me hace sentir como si estuviera bailando en Cuba, la cuna del danzón o, en bello Puerto de Veracruz, claro, que en un evento donde realmente se respete el protocolo de gala, invariablemente asistiré respetando los códigos de vestimenta y con esto también respetando a los demás asistentes y anfitriones.
También no resta importancia mencionar que, en lo que se refiere a alimentos y bebidas, los eventos de gala tienen sus protocolos. En una Cena- Baile de Gala no se pueden ofrecer “fritangas”, ni mucho menos dar opción a que los asistentes lleven sus propios alimentos y bebidas, tampoco platos, cubiertos y vasos de plástico, unicel o cartón. Evidentemente hay más aspectos referentes a los protocolos para un evento de esta categoría, pero, no va al caso mencionarlos, pero sí considero importante replantear en concepto de Gala en dichos eventos danzoneros.
En mi opinión, se debería de eliminar la palabra “Gala” con que se anuncian esos “Bailes Danzoneros”, ya que como lo hemos constatado, no se le está dando el verdadero carácter que amerita esa etiqueta deformando inconscientemente este concepto de tradición, elegancia y distinción.
Bien sabemos que el danzón es libertad, es alegría y no deberíamos de maniatarlo ni caer en sofisticados protocolos muy difíciles de cumplir, claro, los promotores tienen toda la libertad de llamar a sus bailes como quieran, pero al menos documéntense sobre el tema, recuerden la frase que tanto repiten “El Danzón es Cultura”.
Señores (as), promotores (as), no porque alguien se le ocurrió llamarlos pomposamente “Bailes de Gala”, ya todos los demás organizadores tengan que imitar en automático lo que determinada persona con supuesta autoridad, pero sin conocimientos en la materia dictó. Los invito a que Investiguen y determinen si estos dichosos Bailes de Gala, ¿son De Gala?
Nota (*). El presente artículo fue publicado en el boletín DANZÓN CLUB, número 44 de octubre de 2013 y, atendiendo la solicitud de un grupo de amigos interesados en este tema, lo reeditamos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario