Por Enrique Guerrero Rivera “Aspirante Eterno”
Extracto del Boletín Danzón Club No. 112 (Junio, 2019)
Saludos a los lectores del Boletín Mensual, DANZÓN CLUB
Después de haber dado lectura al estupendo libro de la Sra. GUILLERMINA (MINA) ARREGUÍN que se titula como menciona el encabezado, me ha estimulado a conocer de manera muy puntual como es el DANZÓN actual desde la misma intimidad como lo hizo Mina, mediante encuentros con verdaderas leyendas vivientes del ambiente danzonero en la ciudad de México, con entrevistas directas con los bailadores, tanto de la Vieja Guardia en el caso de Antonio Arellano y su esposa Francis, Arturo Sánchez ( El Capullo)y la señora Guille, los singulares Abuelos , Maria Elena y Pedro Velázquez, y no se olvidó de las nuevas generaciones de parejas contemporáneas como son Miguel Ángel Vázquez y Alicia, Maru Mosqueda y Freddy Salazar, Jacobo Salazar junto con su señora madre Tere Salazar, y Miguel Ángel Zamudio de Tres Generaciones de Danzón Veracruzano. Solamente encontré la entrevista directa con un músico, quien de verdad es una Leyenda Viviente y se le conoce como “POLO” de nombre Hipólito González Peña, timbalista de la Danzonera Acerina desde hace varios años y que en este documento escrito por él, se podrá entender el punto de vista de un músico con respecto al baile y los estilos del mismo. Caso que no es frecuente el tener de primera mano la opinión de los músicos ya que al parecer es un tema casi prohibido para ellos, por ello es que me he hecho un fanático observador de los videos que en el espacio del YouTube que nos proporciona un apasionado del Danzón como es el señor JORGE ROOTS, a quien no tengo el placer de conocer personalmente, más si puedo felicitarlo desde éste espacio por su labor de estar haciendo una recopilación del ambiente danzonero en los diversos salones de baile que actualmente existen en la ciudad de México y eventos danzoneros en los diferentes estados, lo cual constituye un testimonio gráfico histórico muy importante para la memoria de las futuras generaciones que se interesen por el sabor y cadencia del antillano ritmo que ha hecho época en la sociedad de la república mayormente en las generaciones del siglo pasado en los año 90s.
Puntualizando la admiración que siento por el trabajo de Jorge Roots acerca de su labor tan íntima entre los componentes de las danzoneras, con lo que me hace sentir integrante de las mismas de forma virtual en que atentos a la lectura de la partitura, de forma muy precisa toman su instrumento cada sección para hacer su ensamble musical de la parte del Danzón que les confiere la partitura, y descansando cuando les toca a otra sección su intervención y sobre todo el entrar a tiempo cuando llega el momento de tuti a la danzonera completa, me encanta el ver ejecutar el tanjeo y el cinquillo al timbalista de cualquier danzonera, pero particularmente a Polo de Acerina y a Francisco Paulino en la danzonera de Cuco Rivero, especialmente en su interpretación del danzón Ana Paulina en que es un espectáculo el verle mover las baquetas sobre los timbales con gran fuerza sin perder precisión, y sobre todo el detalle del costado derecho del timbal macho que delata con sus múltiples abolladuras la intensidad del cascareo que le imprime al ritmo del sabroso montuno, otra cuestión que descubrí con agrado, es la casi imperceptible intervención en la mayoría de las piezas del violinista de la danzónera Acerina, quien al parecer tiene calidad de CONCERTINO o Primer Violín de una Sinfónica por su actitud y calidad de interpretación en los danzones en que se requiere un solo de su parte, mientras que cuando no es protagonista, se le puede ver interviniendo con frases musicales a modo de pichicato en su violín que seguramente esto es de su sentir . Otros muchos aspectos de humanidad que tienen los músicos que se pueden percibir de nosotros los bailadores mediante las imágenes que nos proporciona el trabajo de Jorge, a quienes sentimos casi etéreos para quienes desde el piso solo escuchamos las sincopadas notas del danzón que nos mueven de forma mágica. Agradezco el interés que hayan tenido para estas letras.
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