Por Alejandro Cornejo Mérida
Extracto del Boletín Danzón Club No. 93 (Noviembre, 2017)
A LA CIUDADELA
I
Todos debemos saber
que en esta Ciudadela
donde reina la candela
la historia da a conocer
hechos que hay que temer.
Don Gustavo A. Madero
fue víctima de un trampero
que ambicioso de poder
gobiernos quiso imponer
pero encendió el brasero.
II
Un recuerdo está latente,
la democracia murió,
Victoriano la mató
y también al presidente;
debemos tener presente
al momento de narrar
que tenemos que lamentar
la muerte de los anhelos
pero quedaron los suelos
donde aún podemos bailar.
III
Y la décima jarocha
se escribe en ese lugar;
bailarla no está mal
porque el danzar nos atocha
y la gracia se derrocha.
Una décima al danzón,
pónle mucha atención
el corazón se emociona
la voz mejor se entona
y luce bien tu dicción.
IV
Bailar en la Ciudadela,
verdad que es un encanto;
frente a la dama me planto,
sin ser bailador de escuela,
dispuesto a echar candela
al aire libre bailando.
La vida estaré gozando
sin esperar ovaciones
afloran mis emociones
con un montuno escuchando.
V
Entre danzón y danzón
saludos a mis amigos
que los tengo de testigos
si reverencio a Terrón,
a Julio, el juguetón,
al Gato y a Camargo
y a Lupita yo le encargo
afectos para Tunales
Cano y Jesús por, formales,
bien nos sacan del letargo.
VI
También merece saludos
la danzonera pequeña,
persona que no desdeña,
que siempre nos deja mudos
a imberbes y bigotudos.
A Lesly, yo me refiero,
que lo sepa el mundo entero
que asombra su danzar
su destreza es manjar,
simpatía y gran salero.
Continuará...
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