Por Ysela Vistel Columbié
Extracto del Boletín Danzón Club No. 125 (Julio, 2020)
En 1918 fundó la Orquesta de Neno González, una de las más populares en las décadas de los 50 y 60 con la que actuó en varios cines silentes de la época. Durante más de siete décadas la orquesta no paró de recorrer todos los grandes bailes de Cuba.
El despegue imparable de la orquesta de Neno González fue durante la década de los 30, en 1932 con la llegada de Paulina Álvarez "La emperatriz del Danzonete", José "Papaíto" Raimat y Carlos del Castillo, se presentó en los Conciertos Típicos que presentaba el compositor Jorge Anckermann en el Teatro Alkázar (posteriormente Teatro Musical de La Habana).
No obstante, la orquesta se mantuvo activa hasta que, en 1996, en una gira por España y Portugal, algunos músicos decidieran abandonarla. La Orquesta de Neno González se mantuvo sonando 73 años consecutivos.
No viajó al exterior, el maestro sentía pánico a los aviones. Pero su música si viajó, por pueblos, atravesó fronteras, cultivó almas y alegró la vida de muchos bailadores.
Como pianista se caracterizó por un estilo elegante e impecable, y como compositor, cultivó casi todos los géneros de la música popular cubana, y otras de tradición europea.
Neno se jubiló en 1968, pero continuó asesorando su Orquesta la cual continuo bajo la dirección de su hijo Carlos. Falleció el 8 de junio de 1986 en La Habana, a los 83 años de edad dejando un vasto catálogo de danzones, dentro de los cuales podemos citar:
Dedicación.
Liceo de la Habana Vieja.
Mi danzón.
Sol y sombra.
Son dos épocas.
Vuelve el danzón.
Circunstancia.
Aquí de nuevo.
Nota: La información vertida en este artículo fue proporcionada por Carlos González, pianista de La Orquesta Estrellas Cubanas y nieto de Neno González en una entrevista para el programa radial DANZON CUBA (ver información en este boletín), donde Ysela Vistel conduce la sección especializada llamada SINCOPA.
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