MEXICANOS EN NEW ORLEANS
Por Leonardo Rosen
Extracto del Boletín Danzón Club No. 177 (Noviembre, 2024)
La doctora Claudia Llanas Puente y yo, decidimos viajar otra vez a la famosa ciudad de Nueva Orleans, Louisiana, EeUu, la cuna del jazz y un gran paraíso gastronómico. Habíamos visitado varias veces a la "Crescent City" ("Ciudad Creciente", por la curva lunar del Río Mississippi al pasar por la ciudad), pero, esta vez les invitamos a la hermana y al cuñado de Claudia, Mónica Llanas y Horacio Medina, para viajar con nosotros. Fue su primera vez, y fuimos sus guías durante una semana.
Comenzamos con un recorrido en camión urbano. Claudia y sus parientes son de la CDMX y yo soy de NYC. Observamos que, haciendo una comparación entre nuestras ciudades natales, Nueva Orleans es mucho más pequeña, pues, en dos horas y media vimos varios distritos de las diferentes clases socioeconómicas de este lugar, y no sólo los lujosos. Paramos en el muy hermoso City Park, para tomar café y beignet (un panecito dulce cubierto con azúcar) en una sucursal del Café du Monde. New Orleans fue colonia de Francia, colonia de España y colonia de Francia otra vez, antes de ser comprada por Eu Uu, por eso, se ven muchos nombres franceses y algunos españoles. Paramos también en el Saint Louis Cemetery #3 (panteón). Nuestra guía nos explicó por qué enterraban a los difuntos sobre o arriba de la tierra y no por abajo y estp se debe a que la ciudad está por debajo del nivel del mar. No querían que los restos flotaran a todos lados durante las muy frecuentes inundaciones. La Guia también nos explicó porque las inundaciones del Huracán Katrina fueron horriblemente devastadoras, una historia muy trágica.
Al siguiente día, fuimos al famoso Aquario Audubon y cruzamos el Río Mississippi en barco "ferry" a la ciudad pequeña de Algiers. Ya que no hay cuerpos grandes de agua rodeando la CDMX, los dos novatos de nuestro cuarteto, oriundos de esa ciudad, estaban muy impresionados con "The Big Muddy" ("El Gran Barroso", el apodo del Mississippi). Regresamos por el "ferry" a New Orleans, y fuimos al bar y club de música DBA, situado en el barrio Marigny para escuchar a nuestro amigo, el gran maestro Benny Jones y su famosa Treme Brass Band (Banda de Metales Treme). Son los verdaderos guardianes de la tradición musical de esta ciudad.
Todo el tercer día tuvimos un trastorno, teníamos planeada una visita al prestigioso Ogden Museum of Southern Art (Museo Ogden de Arte Sureño). Yo le había llamado anteriormente, pero no se me había dicho que el museo no se abriría ese día por un evento especial, por lo que en balde llegamos al Museo, ni modo, fue un pretexto para una buena comida. Caminamos al café, Cochon Butcher (Puerco Carnicero), que sirve el mejor sándwich "muffaletta" de New Orleans. Es la aportación de la comunidad italiana y consiste en embutidos y quesos italianos con un aderezo de ensalada de aceituna, en un pan italiano muy especial y excelente que se llama muffaletta. Este sándwich es muy grande, ideal para compartirlo entre dos personas. ¡Yom.yom! Esa noche vimos un desfile muy colorido y ruidoso en anticipación de Halloween. Hubo muchas agrupaciones en disfraces de todo tipo, bandas de metal con batuteras y carrosas alegóricas con gente disfrazada tirando dulces y collares a las muchedumbres a lo largo de la ruta, todo muy alegre, especialmente para los niños.
Commander's Palace Restaurant
El próximo día, domingo, fuimos a uno de los restaurantes más famosos de New Orleans, el Commander's Palace (El Palacio del Comandante) en el Garden District (Distrito de Jardines). Ni hablar, fue excelente con platos como codorniz asada y tamales de camarón, pero diferentes a los mexicanos. A mis compañeros de viaje, este restaurant les encantó, pero no a mí. Es excelente, sí, pero ya que es de lujo, no me sentí cómodo. Después, damos un paseo en el Garden Distict. Las viejas mansiones grandes con sus elegantes jardines son muy hermosas e impresionantes. Más tarde antes de retirarnos a nuestro hotel en el centro, disfrutamos una cena ligera muy buena de pollo frito y jambalaya (parecido a paella española o arroz a la tumbada veracruzana) en el restaurant, Mother´s, que brinda la cocina casera al estilo creole/southern (criollo/sureño).
El lunes, caminamos en el muy conocido French Quarter (Barrio Francés) y fuimos de compras en el French Market (Mercado Francés), que, en la época colonial, fue el mercado (¿tiánguis?) en el cual los blancos, los esclavos negros, la gente libre de color y los indígenas se unieron para vender y comprar sus productos y aún existe siendo muy popular. Nosotros compramos bastante en el French Market. De noche, abordamos al "riverboat" ("barco del río"), Creole Queen (Reina Criolla), para su crucero con cena y música jazz en vivo sobre el Río Mississippi. Así, cenamos una cena buffet criolla y sureña, y después subimos a la cubierta para mirar el río con sus hermosas luces en la oscuridad. "Creole Queen" es una réplica de los "riverboats" del siglo XIX, que se ven en muchas películas. Nuestros dos compañeros novatos se enamoraron por completo del magnífico Río Mississippi esa noche.
En nuestro último día en New Orleans, dimos otro paseo en el French Quarter, y las dos damas de nuestro cuarteto regresaron al French Market para comprar más. Yo aproveché la oportunidad de separarme del grupo para visitar el Museo del Jazz, que se ubica cerca del French Market y al borde del French Quarter. Ese museo muestra toda la historia del jazz desde sus orígenes después de la Guerra Civil (1861-1865), con mezclas de marchas militares y síncopas africanas hasta los tiempos modernos, con una exhibición especial de Louis Armstrong, trompetista, cantante, director de orquesta, que según muchos "fans" y expertos, el músico de jazz más importante del siglo XX. También hay exhibiciones de otros géneros de la música tales com "Rhythm & Blues" y "Rock & Roll". Para mí, fue un momento especial mirar de cerca el gran piano de "Fats" Domino, uno de los grandes pioneros del "Rock & Roll" y, fue una de las más queridas estrellas de todos los tiempos, además un símbolo cultural de New Orleans.
Ese día también fue mi cumpleaños y mi querida Claudia nos invitó a una cena magnífica en el Cochon (Puerco en español), el restaurant hermano del café, Cochon Butcher, ya mencionado. No describiré todos los platos deliciosos que cenamos, sólo dos. Mónica, la hermana de Claudia, pidió alligator meat (carne de lagarto), empanizada en una salsa cremosa. La probé y fue muy sabrosa. Claudia no quiso probarla, por ser carne de reptil. Yo ordené un plato de puerco asado con una salsa "gravy" y collard greens (hojas de acelgas). Ordenamos también macaroni y queso. Todo fue muy rico y sabroso, muy representante de las cocinas creole, cajun y southern. Se lo agradezco a mi Claudia.
No puedo describir aquí todo lo que vimos e hicimos en New Orleans, sin embargo, espero haberles dado un poco del sabor de esta ciudad muy importante culturalmente y muy diferente a las otras ciudades de EeUu. ¡Soy de Nueva York, pero les confieso que New Orleans es mi ciudad favorita en mi país natal!