Por Enrique Guerrero Rivera “Aspirante Eterno”
Extracto del Boletín Danzón Club No. 61 (Marzo, 2015)
Saludos cordiales desde Querétaro para el Universo Danzonero
Esta es la portada del ejemplar que gentilmente me envió el autor, Alejandro Cornejo Mérida en donde pude captar con todos los sentidos el aroma del ambiente danzonero de muchas épocas que en los salones de baile se estableció el rito de presentarse a disfrutar de las cadenciosas y sincopadas notas que del Danzón hacen especial platillo para los gourmets que se deleitan semana a semana en los salones.
Debo de agradecer tal distinción para mi persona de parte de Alejandro, a quien no he tenido oportunidad de conocer personalmente, sino solamente por nuestra mutua colaboración en el Boletín Danzonero que publica nuestro común amigo Luis Pérez “Simpson” sin embargo se hace presente otra virtud que el Danzón emana, el crear amistades, aún sin haberse visto personalmente.
Ahora quiero comentarles las sensaciones que algunos de los relatos que componen el libro me produjeron y que también reflejan el sentir del autor, por ejemplo el primero de ellos: VIERNES DE DANZÓN. No se cuán ficticio sea esta historia, más es bastante probable que sea verídica ya que muchos amantes del Danzón más de alguna ocasión hemos pensado en que hasta que le rindamos tributo a la tierra podamos seguir sintiendo, si es que se puede, la alegría que la música danzonera produce en el ánimo, que después se traslada a nuestro cuerpo, deseamos que no exista tristeza por nuestra partida a un mundo mejor, que se inunde de notas musicales el ambiente en nuestro último adiós, que el llanto sea de alegría para quienes se quedan pues les queda la oportunidad de continuar en la fiesta de la vida
El cuento que también me impacto sobremanera fue el denominado AZUL Y BLANCO debido a que retrata la transformación que sufrimos en muchos aspectos quienes por primera vez tenemos contacto con el ambiente del baile de Danzón, y que nos hace cambiemos de pensamiento acerca del vestir pues nuestra personalidad en cierto porcentaje se desprende del estilo de ropa que usamos cotidianamente, de los lugares que frecuentamos de las personas con quienes nos relacionamos o sea que son varios factores que conforman nuestra imagen ante la sociedad, y por ello presentamos cierta resistencia al cambio de todos éstos factores, pues la costumbre nos hace sus esclavos. Pero una vez inmersos en la nueva vida, en donde encontramos nuevos amigos, nuevos deleites, como dice Girbran Girbran, no encontramos con una nueva máscara, esta vez, la del placer integral, en donde cada semana estamos a la espera de la llegada del día y del momento de volver a sentir vibra el alma debido a las jubilosas notas del Danzón.
Muchos recuerdo me trajo el relato del SOSPECHOSO, más por la descripción del ambiente caluroso, la sensación del sudor corriendo por el cuerpo empapando la ropa, las gotas que perlan la frente y la cabeza en el debido a la ola de calor vespertino que inunda las calles del puerto de Veracruz y que solamente los nacidos en este lugar pueden soportar sin mostrar signos de molestia por lo agobiante del caliente clima. Lo del olor putrefacto que invadió el aire y lo convirtió en irrespirable es bastante simpático y sobre todo muy común en las aglomeraciones. Ingenioso es el relato de Danzoneros usando el nombre de los diferentes Danzónes haciendo un entretenido relato y sobre todo convertido en monólogo.
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